Pensar en la muerte puede conducir a una buena vida
Pensar en la muerte en realidad puede ser bueno. La
conciencia de la mortalidad puede mejorar la salud física y nos ayuda a
volver a dar prioridad a nuestros objetivos y valores, según un nuevo
análisis de recientes estudios científicos. Aún
el hecho de no pensar conscientemente en la muerte - como al pasar por un
cementerio - podría llevar a cambios positivos y promover la ayuda a los
demás.
Investigaciones previas sugerían que el pensamiento acerca de la muerte era destructivo y peligroso, lo que alimentó desde los prejuicios y la codicia, a la violencia. Tales estudios, relacionados con la teoría de la gestión de terror (TMT) que postula que defendemos ciertas creencias culturales para manejar nuestros sentimientos de la mortalidad, rara vez han explorado los beneficios potenciales de la conciencia de la muerte.
"La investigación TMT ha tendido principalmente a tratar las actitudes negativas y los comportamientos nocivos, y se ha vuelto tan profundamente arraigada en nuestro campo, que algunos han sugerido recientemente que la conciencia de la muerte no es más que una fuerza sombría de la destrucción social", según dice Kenneth Vail, de la Universidad de Missouri, autor principal del nuevo estudio en la edición digital de la Revista de Personalidad y Psicología Social de este mes. "Ha habido una comprensión muy poco integradora de las sutilezas mediante la cual la conciencia de la muerte podría ser capaz para motivar actitudes y comportamientos que puedan reducir al mínimo el daño a uno mismo y a otros, y pueda promover el bienestar".
En la construcción de un nuevo modelo de lo que pensamos sobre nuestra propia mortalidad, Vail y sus colegas realizaron una extensa revisión de estudios recientes sobre el tema. Encontraron numerosos ejemplos de experimentos, de laboratorio y de campo, que sugieren un lado positivo a los recordatorios naturales sobre la mortalidad.Por ejemplo, Vail señala un estudio realizado por Mateo Gailliot y sus colegas en el Boletín de Personalidad y Psicología Social en 2008, en el que observaron que el sólo hecho de estar físicamente cerca de un cementerio afectaba a la gente hasta el punto de estar más dispuestas a ayudar a un extraño. "Los investigadores sugirieron la hipótesis de que si el valor cultural de ayudar a alguien resultó importante para las personas, entonces la conciencia de la muerte podría incrementar los comportamientos de ayuda", dice Vail.Los investigadores observaron personas que, o bien pasaban a través de un cementerio o estaban a una cuadra de distancia, fuera de la vista del cementerio. Colocaron actores en esos lugares que hablaban con los participantes acerca del valor de ayudar a los demás, o de un tema control, y momentos más tarde, otro actor dejaba caer su cuaderno de notas. Los investigadores entonces probaron, en cada condición, cuántas personas ayudaban al extraño."Cuando el valor de ayudar se hizo notable, el número de participantes que ayudó a la segunda persona con su cuaderno de notas fue 40% mayor en el cementerio que a una cuadra del cementerio", dice Vail. "Otros experimentos de campo y experimentos de laboratorio estrictamente controlados han reproducido estos hallazgos y otros similares, mostrando que la conciencia de la muerte puede motivar el aumento de las expresiones de tolerancia, empatía, igualitarismo, compasión y pacifismo"Por ejemplo, un estudio de 2010 de Immo Fritsche y co-autores de la Universidad de Leipzig reveló cómo el aumento de la conciencia la muerte puede motivar comportamientos sostenibles en favor del medio ambiente. Y un estudio realizado en 2009 por Zachary Rothschild y compañeros, de la Universidad de Kansas, mostró cómo una mayor conciencia de la muerte puede motivar a los fundamentalistas religiosos norteamericanos e iraníes a mostrar compasión pacífica hacia miembros de otros grupos, cuando los textos religiosos hacen que estos valores sean más importantes.Pensar en la muerte también puede promover una mejor salud. Estudios recientes han demostrado que cuando se les recordó la muerte las personas pueden optar por mejores opciones de salud, tales como el uso de más protector solar, fumar menos, o un aumento de los niveles de ejercicio. Un estudio de 2011 por D.P. Cooper y coautores encontró que los recordatorios de la muerte aumentaron las intenciones de realizar el autoexamen de mamas, cuando las mujeres fueron expuestas a la información que vinculaba el comportamiento de auto-empoderamiento.Una consecuencia importante de este cuerpo de trabajo, de Vail, dice, es que debemos "fijar la atención y los esfuerzos de investigación hacia una mejor comprensión de cómo las motivaciones provocadas por la conciencia la muerte en realidad puede mejorar la vida de la gente, en lugar de la forma en que puede causar enfermedad y conflictos sociales". Escriben los autores: "La danza de la muerte puede ser un paso delicado pero potencialmente elegante hacia una buena vida."
Traducido por Rubén Carvajal Santana de ScienceDaily (19 de abril 2012
Journal Reference:
Investigaciones previas sugerían que el pensamiento acerca de la muerte era destructivo y peligroso, lo que alimentó desde los prejuicios y la codicia, a la violencia. Tales estudios, relacionados con la teoría de la gestión de terror (TMT) que postula que defendemos ciertas creencias culturales para manejar nuestros sentimientos de la mortalidad, rara vez han explorado los beneficios potenciales de la conciencia de la muerte.
"La investigación TMT ha tendido principalmente a tratar las actitudes negativas y los comportamientos nocivos, y se ha vuelto tan profundamente arraigada en nuestro campo, que algunos han sugerido recientemente que la conciencia de la muerte no es más que una fuerza sombría de la destrucción social", según dice Kenneth Vail, de la Universidad de Missouri, autor principal del nuevo estudio en la edición digital de la Revista de Personalidad y Psicología Social de este mes. "Ha habido una comprensión muy poco integradora de las sutilezas mediante la cual la conciencia de la muerte podría ser capaz para motivar actitudes y comportamientos que puedan reducir al mínimo el daño a uno mismo y a otros, y pueda promover el bienestar".
En la construcción de un nuevo modelo de lo que pensamos sobre nuestra propia mortalidad, Vail y sus colegas realizaron una extensa revisión de estudios recientes sobre el tema. Encontraron numerosos ejemplos de experimentos, de laboratorio y de campo, que sugieren un lado positivo a los recordatorios naturales sobre la mortalidad.Por ejemplo, Vail señala un estudio realizado por Mateo Gailliot y sus colegas en el Boletín de Personalidad y Psicología Social en 2008, en el que observaron que el sólo hecho de estar físicamente cerca de un cementerio afectaba a la gente hasta el punto de estar más dispuestas a ayudar a un extraño. "Los investigadores sugirieron la hipótesis de que si el valor cultural de ayudar a alguien resultó importante para las personas, entonces la conciencia de la muerte podría incrementar los comportamientos de ayuda", dice Vail.Los investigadores observaron personas que, o bien pasaban a través de un cementerio o estaban a una cuadra de distancia, fuera de la vista del cementerio. Colocaron actores en esos lugares que hablaban con los participantes acerca del valor de ayudar a los demás, o de un tema control, y momentos más tarde, otro actor dejaba caer su cuaderno de notas. Los investigadores entonces probaron, en cada condición, cuántas personas ayudaban al extraño."Cuando el valor de ayudar se hizo notable, el número de participantes que ayudó a la segunda persona con su cuaderno de notas fue 40% mayor en el cementerio que a una cuadra del cementerio", dice Vail. "Otros experimentos de campo y experimentos de laboratorio estrictamente controlados han reproducido estos hallazgos y otros similares, mostrando que la conciencia de la muerte puede motivar el aumento de las expresiones de tolerancia, empatía, igualitarismo, compasión y pacifismo"Por ejemplo, un estudio de 2010 de Immo Fritsche y co-autores de la Universidad de Leipzig reveló cómo el aumento de la conciencia la muerte puede motivar comportamientos sostenibles en favor del medio ambiente. Y un estudio realizado en 2009 por Zachary Rothschild y compañeros, de la Universidad de Kansas, mostró cómo una mayor conciencia de la muerte puede motivar a los fundamentalistas religiosos norteamericanos e iraníes a mostrar compasión pacífica hacia miembros de otros grupos, cuando los textos religiosos hacen que estos valores sean más importantes.Pensar en la muerte también puede promover una mejor salud. Estudios recientes han demostrado que cuando se les recordó la muerte las personas pueden optar por mejores opciones de salud, tales como el uso de más protector solar, fumar menos, o un aumento de los niveles de ejercicio. Un estudio de 2011 por D.P. Cooper y coautores encontró que los recordatorios de la muerte aumentaron las intenciones de realizar el autoexamen de mamas, cuando las mujeres fueron expuestas a la información que vinculaba el comportamiento de auto-empoderamiento.Una consecuencia importante de este cuerpo de trabajo, de Vail, dice, es que debemos "fijar la atención y los esfuerzos de investigación hacia una mejor comprensión de cómo las motivaciones provocadas por la conciencia la muerte en realidad puede mejorar la vida de la gente, en lugar de la forma en que puede causar enfermedad y conflictos sociales". Escriben los autores: "La danza de la muerte puede ser un paso delicado pero potencialmente elegante hacia una buena vida."
Traducido por Rubén Carvajal Santana de ScienceDaily (19 de abril 2012
Journal Reference:
- K. E. Vail, J. Juhl, J. Arndt, M. Vess, C. Routledge, B. T. Rutjens. When Death is Good for Life: Considering the Positive Trajectories of Terror Management. Personality and Social Psychology Review, 2012; DOI: 10.1177/1088868312440046
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